Te quiero pero no te amo

Parece ser la frase que encaja en la mayoría de los casos que mas conozco por amigos (y puede que me incluya). Tal vez prefieren el querer por que es menos doloroso, mas cariñoso, mas realista pero también mas egoísta. Al parecer es un mecanismo de autodefensa, no ama ni se deja amar, lo prefiere todo en gris, no en blanco, no en negro, el gris lo es todo, perfecto para describir el cariño. Vive a mil por hora, te mira tiernamente, te hace el amor cursimente salvaje, pero él insiste en que no te ama, te quiere, es perfecto oírte decir que sólo lo quieres, así se siente menos culpable de no amarte. Así es mas fácil dejarte, si es que fuese el caso claro está, pero por suerte no es el tuyo. A tí, insisto, te quiere. Y como te quiere se da a tí, te cuida a mas no poder, se molesta contigo por que no te cuidas, te cela si otro te mira demasiado, pero si él mira a otra por mucho tiempo, ni te molestes en resondrarlo, por que los ojos están echos para ver y punto, dice él.

Te quiero, te quiero, te quiero, y tú te derrites de amor por él. Él es el culpable de que sientas que todo ese tormento sea agradable, el sólo escucharlo decir que te quiere. Pero como todos, siempre anhelas más, quieres un te amo, y piensas que es mejor no provocarlo, piensas que eso debe llegarle solo a él, pero tú no resistes y se lo dices. Entonces él agrega un silencio, te abraza, te besa por los segundos mas largos de tu vida, y sigue con lo suyo, tú te quieres convencer de que sí es amor, y que fue miedo todo aquello. Pero tu corazón va destrozándose, va colocando la alarma de emergencia, esa que te dice, corre, huye, sálvate ahora, sálvate por que él no te ama, te quiere.

Corazón distendido


Me encuentro en el medio de la nada y en el fondo del todo.

Es fácil ubicarme pero no entenderme.

Lo creo poder todo pero no hago nada.

Me gusta el negro pero me encuentro en blanco.

El día es para andar y la noche para descansar pero yo sólo logro holgazanear.

A veces miro de frente pero estoy de espaldas.

El crepúsculo se ciñe a mi costado pero el amanecer lo esconde.

Quiero gritar pero existe un enorme silencio.

Las palabras abundan pero no se dispersan, se acumulan vagamente hasta crear historias, fábulas, cuentos, leyendas de enmienda que sólo buscan excusar a las verdades.

Caminar de la mano contigo misma, caminar dormida, caminar sobre tus sueños y maleficios.

No despertar, no regresar, gritar, doler, llorar.

Regresa cuando menos lo esperaba, regresa cuando ya creía haberlo dejado atrás, regresa para recordarme que es mi reto constante, mi lucha, mi miedo, mi pesadilla.

Mi pecho palpita lento, pausado para ver si es capaz de detenerse y detener con él al mundo.

Palpita lento para disfrutar de la felicidad que pasa rápido.

Palpita porque no sabe hacer otra cosa.

Palpita buscando razones para existir.