viernes, 4 de marzo de 2011

El Sillón de Pizarro y la Problemática de Salud Oral


Un plan de gobierno innovador y serio contempla la propuesta de políticas concretas que permitan identificar problemas y plantear soluciones frente a ellas. Más loable aún es la capacidad de hacer de un problema no muy popular y específico una bandera de campaña en esta intrincada carrera hacia el sillón de Pizarro.
Aunque definitivamente mi voto no se inclinará por el candidato de la solidaridad, las propuestas de gobierno de Luis Casteñada Lossio parecen más que interesantes.
La alta incidencia de caries dental en la población peruana constituye la enfermedad más diseminada en nuestro país y como consecuencia de esta, la falta de dentadura es un problema que aqueja a buena parte de nuestros compatriotas. Si bien es cierto las políticas de salud pública aplicadas por el actual gobierno han significado esfuerzos poco fructíferos, es evidente que se requiere de voluntad política para tratar un problema de suma seriedad, como lo es la caries dental y las enfermedades subsecuentes que ella conlleva.

En el plan de gobierno de Luis Castañeda Lossio se consigna la problemática de salud oral como un importante punto a incidir durante su mandato, es más, la perdida de dentadura es consignada en el mismo documento, a un rango similar de identificación de problema.

1. Limitado acceso a los servicios de salud
2. Deficiente calidad de los servicios públicos de salud
3. Inaccesibilidad de medicamentos para gran parte de la población del país.
4. Alta incidencia de pérdida de dentadura en la población más pobre.



La acciones concretas que Castañeda plantea frente al punto 4 son las siguientes:

- Crear el Programa Sonrisa de Mujer que permita colocar prótesis dental a las mujeres más pobres, con la finalidad de elevar su dignidad y autoestima personal.

− Crear mecanismos que faciliten la atención dental para el resto de la población afectada.

Siempre se ha dicho que los políticos no tienen muy clara la visión de salud como un problema que requiere prevención antes que tratamiento. En la misma medida que los candidatos crean que construyendo mayor cantidad de hospitales, o lo que es lo mismo, confeccionando miles de prótesis dentales van a solucionar los viejos problemas de salud. El bienestar no llegará.
Se requiere prevención entendida como inversión, que aunque no pueda romperse con ellas una botella de Champagne ni cortar una cinta frente a los flashes de cámaras periodísticas, es lo que a fin de cuentas traerá la revolución en el relegado sector salud. Las intenciones de Castañedas son buenas, sí. Pero quizá pueda reorientar su visión frente ellas, pues las prótesis dentales más que un fin estético o psicológico permiten establecer una adecuada masticación y por ende una adecuada digestión.

Las políticas de salud oral son temas que los aspirantes deben plantear con claridad y concreción. Castañeda, bien o mal, es un ejemplo.

Anexos:

Plan de gobierno Solidaridad nacional 2011

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